El ultrasonido funciona al escuchar ondas de sonido que son dirigidas y rebotadas desde un equipo especializado, lo que da como resultado una imagen. En la ecografía 3D, 4D y 5D, se utilizan esas mismas ondas sonoras, pero esta vez se dirigen hacia varios planos, lo que permite que el equipo receptor “vea” la imagen en tres dimensiones. Esencialmente, 3D 4D y 5D es exactamente lo mismo que el ultrasonido 2D, pero se utiliza un software diferente para interpretar los datos recopilados y crear estas increíbles imágenes.
La ecografía 3D, 4D y 5D utiliza exactamente la misma frecuencia de intensidad que la ecografía 2D, que se ha utilizado durante décadas para el diagnóstico por imágenes de rutina. Los profesionales médicos generalmente reconocen que los ultrasonidos son seguros y de bajo riesgo. Así que no hay necesidad de preocuparse por ultrasonidos no diagnosticados.
¿Cuál es la diferencia?
2D fue el estándar para imágenes de ultrasonido y determinación del sexo durante mucho tiempo. Sin embargo, las imágenes 2D pueden parecer planas y, a menudo, requieren que el médico “persiga al bebé” para obtener una imagen óptima.
El ultrasonido 3D da como resultado imágenes tridimensionales de alta resolución del bebé. Las imágenes en 3D brindan un primer vistazo más claro y realista del bebé.
El ultrasonido 4D agrega la dimensión del movimiento, creando un “video” de los movimientos del bebé. Con la tecnología de ultrasonido 4D, las imágenes fijas producidas con ultrasonido 3D se reproducen una tras otra, creando una imagen en movimiento en tiempo real. 4D le permite ver a un bebé moviéndose, bostezando, estirándose y sonriendo en tiempo real.
El ultrasonido 5D agrega otra capa de realismo a la imagen del bebé al producir una imagen tridimensional con tonos realistas de rosa rojizo. El “tono de la carne” puede dar la sensación de estar mirando al bebé justo dentro del útero.
El Dr. Daniel García, ginecólogo y obstetra de Ginefem, nos explica las diferencias entre las ecografías 3D, 4D y 5D.