Está demostrado que, según el tipo de deporte que se practique, la intensidad, la continuidad y la personalidad de la persona, se pueden dar distintos tipos de efectos en nuestra salud. Por ello, ante el comienzo de una actividad física es recomendable el asesoramiento por parte de un profesional adecuado para determinar características y objetivos.
Muchas veces se practica ejercicio sin ningún tipo de control o medida. Esto puede provocar lesiones o fatiga excesiva y al final conlleva al abandono de la actividad. Los estudios han mostrado hasta ahora que obtenemos beneficios siempre que llevemos a cabo una actividad física de forma constante, es decir, practicándola unas tres veces por semana y con una duración mínima de treinta minutos. Además, otro hecho comprobado es que cuando dejamos de practicar dicha actividad muchos de sus beneficios desaparecen, por lo que es importante instaurar el deporte como un hábito en nuestra rutina diaria.
En CanaryDoctor queremos informarte de los beneficios que produce la práctica regular de ejercicio físico:
Según algunos estudios, el ejercicio físico podría ser uno de los principales y más efectivos tratamientos contra la depresión y otros trastornos del humor y la personalidad. El efecto antidepresivo del ejercicio físico está relacionado principalmente con la serotonina, un neurotransmisor que influye en nuestro estado de ánimo, ansiedad y felicidad. La actividad física produce la liberación de endorfinas, las cuales actúan directamente sobre el cerebro produciendo una sensación de bienestar y relajación. Por tanto, practicar deporte no solo ayuda a tratar la depresión o la ansiedad, también ayuda a prevenirla.
El ejercicio aeróbico regular tiene el potencial de mejorar el funcionamiento ejecutivo. Completar tareas complejas, tener más memoria son algunos de los beneficios que implementa el deporte a nuestro cerebro. Además está demostrado que empezar a hacer ejercicio mejora la capacidad de concentración. Tanto en niños como en adultos, las habilidades cognitivas que ven favorecidas son la memoria de trabajo, la atención y el control inhibitorio. En consonancia, hacer ejercicio puede ayudar a prevenir enfermedades neurodegenerativas como el alzhéimer.
Realizar ejercicio de forma constante aumenta la autoestima y mejora la calidad de vida. Con el ejercicio físico tonificamos los músculos, perdemos grasa y, en consecuencia, nos encontramos en mejor forma, lo que va a repercutir directamente en una mejor valoración de nosotros mismos.
A partir de los 30 años el cerebro comienza a perder volumen de forma natural, lo que provoca la pérdida progresiva de funciones, que se irá acelerando y agudizando con el paso de los años. Algunas investigaciones han demostrado que haciendo ejercicio, los adultos de más edad pueden recuperar entre un 1 y un 2% del volumen cerebral en la zona del hipocampo, lo cual supone el equivalente a revertir el envejecimiento de este órgano unos 2 años.
¿Aún tienes dudas si empezar practicar deporte asiduamente? El ejercicio físico es natural, es fácil, te ayuda a mejorar la calidad de vida, aumenta tu autoestima, previene enfermedades y mejora tu aprendizaje. ¡No dudes más, y anímate a practicar ejercicio!
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