Según vamos cumpliendo años, tememos cada vez más la aparición de las arrugas. Existen factores externos a nuestra biología que aceleran esta aparición, y que puedes evitar fácilmente.
Con la edad, la cantidad de colágeno y elastina que produce nuestro organismo va disminuyendo. Estas proteínas son fundamentales ya que son las responsables de aportar la firmeza e hidratación que necesita nuestra piel. Poco a poco se van formando depresiones en la superficie de la piel, y es lo que conocemos como arruga.
Sin embargo, existen otros factores externos a nuestra biología que incentivan la aparición de las arrugas de manera prematura. Y es que la forma en la que nos mimamos, el estilo de vida y los hábitos que llevamos, puede influir considerablemente.
Los desencadenantes más comunes son:
- El estrés y un sueño desregulado.
- El consumo nocivo de alcohol y/o tabaco.
- Una mala alimentación. Una dieta equilibrada es fundamental para aportar los nutrientes que necesitamos.
- Falta de hidratación. El consumo mínimo de agua es vital para que la piel se mantenga hidratada.
- Enfermedades genéticas metabólicas y endocrinas.
- Vivir prolongadamente en lugares muy secos.
- La exposición constante a los rayos del sol. Por ello, en lugares como Canarias, con un clima primaveral durante todo el año, es aconsejable cuidarse más.
Por suerte, la mayoría de estos elementos se pueden combatir fácilmente si se mantiene un estilo de vida saludable. Te mostramos cómo.
¿Cómo cuidar nuestra piel para evitar las arrugas?
- Protege la piel de los rayos del sol siempre. Estamos acostumbrados a protegernos únicamente cuando acudimos a la playa con la protección solar. Sin embargo, nuestra piel sufre a diario los efectos solares de Lorenzo. Por ello, primero debes consultar qué factor de protección solar se ajusta más a tu tipo de piel. Segundo, protege la piel con la protección solar si vas a pasar jornadas largas expuesto al sol.
- Deja de fumar. Seguro que habrás escuchado muchas veces que el tabaco es perjudicial para la salud. Pues también lo es para la piel. Sin ir más lejos, se ha comprobado que los fumadores suelen aparentar más edad de la que tienen, en concreto 5 años como mínimo.
- Evita realizar gestos faciales innecesarios. Con los movimientos faciales se contraen músculos que van generando micro-surcos en la epidermis. De esta manera pueden aparecer, por ejemplo, las temidas patas de gallo o las líneas de la frente. Por ello, en la cara solo vale el movimiento de la sonrisa. Jamás dejes de reír.
- Mantén una alimentación equilibrada. La piel es el mayor reflejo de que nos cuidamos, sobre todo con la alimentación. Múltiples estudios coinciden en que una dieta rica en verduras y frutas ayuda a prevenir la aparición de arrugas. Los alimentos son el mayor aliado para la piel.
- Bebe menos alcohol. Una copa de vino en ocasiones especiales no va a deshidratar tu piel. Beber alcohol de alta graduación de manera continuada, sí.
- Mantén una vida activa. El ejercicio es fundamental por diferentes motivos, entre ellos mejorar la calidad de la piel. Esto ocurre porque la circulación sanguínea aumenta, la piel se oxigena y se fortalece el sistema inmunológico.
- Limpia e hidrata tu piel. Haz uso de productos cosméticos para mantener la piel limpia e hidratada, sobre todo por la contaminación a la que está expuesta.