Se usan con mayor frecuencia en la frente, lo que hace que la frente y las cejas se vean más suaves, al tiempo que mantiene el movimiento y la posición natural de la frente.
Este procedimiento es ideal para esta época del año (y cualquiera en realidad), pero durante las festividades que tomamos tantas fotos y quedamos con tantos amigos y familiares, nos permiten lucir nuestra mejor versión mientras nos sentimos seguros, renovados y con unos cuantos años menos.
Desde CanaryDoctor respondemos las preguntas frecuentes sobre este maravilloso tratamiento de la medicina estética:
Llamada toxina botulínica o botox, es un tratamiento inyectable aprobado por la FDA que reduce temporalmente la apariencia de líneas de frente, líneas de expresión y patas de gallo de moderadas a severas. También es el tratamiento estético no quirúrgico más popular del mundo.
Muchos hombres y mujeres no saben que la neurotoxina se ha utilizado en aplicaciones médicas durante más de medio siglo. Como tratamiento estético, la neurotoxina está respaldado por más de 15 años de estudios clínicos y actualmente se utiliza en 96 países de todo el mundo.
La toxina botulínica es una neurotoxina y actúa inhibiendo temporalmente el movimiento de ciertos músculos faciales. Es posible que hayas escuchado que la toxina botulínica actúa “paralizando” los músculos de la cara. Eso no es del todo exacto. Si bien los músculos faciales específicos no podrán recorrer su rango completo de movimiento, aún podrán realizar movimientos faciales normales y expresar emociones.
Los músculos tratados con neurotoxina no podrán tirar de la piel para formar arrugas, líneas y pliegues. Eso es lo que crea una apariencia más suave y juvenil. Los resultados son definitivamente notables, pero también de aspecto natural.
La toxina botulínica se administra en una serie de inyecciones. Se utiliza una aguja muy fina y el proceso es indoloro. Es posible que sienta un breve pellizco cuando la aguja ingresa en su piel, pero no hay una molestia duradera. Tampoco hay necesidad de anestesia ni preparación previa.
Después de las inyecciones, comenzarás a notar la diferencia en un plazo de 24 a 48 horas, aunque pueden pasar de 3 a 10 días para que se desarrollen todos los efectos. Puedes esperar que tus resultados duren alrededor de cuatro meses.
En ese punto, comenzarás a notar que tus líneas y arrugas regresan gradualmente. Una de las mejores cosas de la toxina botulínica es el hecho de que los resultados son temporales. Eso te da la oportunidad de evaluar cómo funciona el tratamiento y decidir si deseas continuar con otra ronda de tratamiento.
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